Más allá de las construcciones antiguas, el casco histórico y el castillo de Santa Bárbara, Alicante es una ciudad fascinante en términos de paisaje urbano. Calles, avenidas y pasajes pintorescos, los cuales integran una trama urbana interesante y enigmática, coronan cada centímetro de la ciudad. Ahora se abordarán a grandes rasgos estas cuestiones.
Uno de los rasgos distintivos de Alicante es su costa extensa conformada por playas y calas de arenas finas playas y calas de arenas finas, además de una amplio paseo costero que permite recorrer gran parte de la ciudad de sur a norte.
En la zona de Alicante se encuentra una de las playas más largas y mejor equipadas de toda España, la playa de San Juan. Esta zona se encuentra cercada por casas de estilo clásico de tonos blancos y azulados, las que homogen
izan el paisaje urbano. Además, hay bloques de departamentos más modernos que le dan un toque más veraniego al sector.
Pero también hay zonas más tranquilas y menos bulliciosas, como lo es el Cabo de las Huertas. En este sector la naturaleza es la protagonista pues la zona residencial se encuentra rodeada de dunas, arenas, árboles y vegetación circundante con mucho espacio para circular. Aquí abundan los chalets independientes y búngalos.
Pero más que todo esto, la ciudad cuenta con pasajes encantadores en los que se abre la vida de la ciudad, su arte, gastronomía e interacción. En estos recovecos funciona lo fundamental, el intercambio, de la mano de un paisaje urbano que encantan desde la primera vista.
Para descubrir Alicante de verdad es necesario ahondar y perderse por sus calles. Uno nunca sabe con qué podrás encontrarse a la vuelta de la esquina.
